El economista planteó que en el escenario actual se observan signos de recuperación de la industria y de determinados sectores de la economía, pero de manera asimétrica. Planteó que las mejoras expectativas, ratificadas en los resultados de las elecciones, serán fundamentales para el crecimiento proyectado el año próximo, en línea con las metas y reformas graduales propuestas por el Gobierno nacional.

Dante Sica, economista y director de la Consultora Abeceb, fue uno de los disertantes más esperados durante la 13ª Jornada de la Industria organizada por la Unión Industrial de Entre Ríos (UIER). En ese marco, analizó cuáles son las expectativas que permiten anticipar en 2018 y los años siguientes una consolidación del cambio de modelo económico que impulsó el Gobierno nacional.

Para el especialista, las elecciones son determinantes para ratificar el rumbo y ya las PASO fueron un anticipo. “Hubo un alineamiento de expectativas entre la economía y la política. Lo importante es que el año que viene se consolide el programa económico. Con una mejora de expectativas, Argentina tiene que avanzar en esta consolidación”, expresó, y proyectó un crecimiento del 3,5%.

Justamente en esta línea, Diego Coatz, director ejecutivo de la Unión Industrial Argentina (UIA) que presentó al economista, brindó su apreciación sobre el desarrollo de la economía y ratificó estas expectativas.”La macro se empieza a recuperar. Vamos a tener un 2018, 2019 y 2020 de crecimiento más sostenido en la medida de que se salga de la trampa del ingreso medio. Pero sin dudas la economía ya arrancó y es muy probable que se continúe en el tiempo”.

 

En su disertación, Sica también planteó que este crecimiento se presenta desafiante. “El gran desafío no solo es crecer, sino también duplicar el nivel de renta”, señaló y subrayó la importancia de avanzar en mayor competitividad. Asimismo, anticipó que “para la industria va a haber ganadores y perdedores, porque habrá sectores con oportunidades más grandes”.

Respecto de los rubros, señaló que la construcción, el agro y la energía están liderando el crecimiento y las inversiones, mientras que hay otros como alimentos y bebidas que van muy lentos y finalmente están los rezagados como el petróleo o los que estuvieron ligados al consumo masivo durante los últimos años.

En cuanto a los indicadores más importantes a los que deben estar atentos, el economista dijo que “el tipo de cambio está un poco más calmo”, pero advirtió que las elecciones “volvieron a poner en el centro de la escena el retraso cambiario”. Además, distinguió que “la inflación está en descenso, pero es incómoda”. Respecto del consumo dijo que “está reaccionando” y que “el empleo se recupera”, además de destacar la “política procícilica” en materia fiscal.

Reformas

Para Sica, la Argentina está saliendo de la tercera fase del modelo económico que comenzó en diciembre de 2015 y octubre será el hito para el comienzo de la cuarta. “Entramos en una fase donde no preguntamos si hay brotes verdes o no, sino si el crecimiento es sostenido o no”. No obstante, aclaró que depende de “la fuerza que tenga el gobierno para avanzar en distintas reformas”. “No van a ser las grandes reformas, pero sí las importantes en términos graduales”, aseveró.

En relación a ello, analizó la incidencia del contexto internacional, al que considera como “altamente favorable”, con desafíos pero también con oportunidades. En este sentido, subrayó el rol de Brasil como socio estratégico para consolidar el crecimiento. “Brasil es buena noticia ya dejando de caer. Empezamos a ver impacto en el sector automotriz”, sostuvo.

Ahora bien, en su análisis el especialista señaló que “por primera vez hay convergencia de política económica entre Argentina y Brasil”, precisamente en lo que refiere a las metas y reformas estructurales que ya aplicó el vecino país. “Esto fuerza mucho a la Argentina a plantearse reformas el año que viene, porque empieza a valer la micro a la hora de pescar proyectos de inversión”, advirtió.

Al respecto, Sica enumeró cuatro reformas que el Gobierno nacional va a encarar en 2018, aunque con gradualismo: reforma laboral, tributaria, previsional y de responsabilidad fiscal con las provincias. “El Gobierno está decidido a encarar estas cuatro leyes”, indicó, pero distinguió que “el gran tema del año que viene van a ser los costos laborales”.