Diego Coatz, director Ejecutivo y economista Jefe de la Unión Industrial Argentina, brindó un panorama sobre los temas clave de la macroeconomía en el país, focalizada en la agenda de las pymes y los desafíos del país para salir de las crisis recurrentes. En este sentido, subrayó la necesidad de poner en “poner en funcionamiento a la industria, los recursos naturales y la capacidad intelectual que tiene el país”.
El análisis sobre la macroeconomía argentina fue central en el debate que se generó durante la XIV Jornada de la Industria de Entre Ríos. Para ello, Diego Coatz, director Ejecutivo y economista Jefe de la Unión Industrial Argentina (UIA), integró un panel junto con Miguel Acevedo, presidente de la entidad, a través del cual planteó los cuatro ejes por los cuales resulta necesario avanzar en una política industrial.
“¿Dónde estamos?”, se preguntó en primer lugar. Para responder a este interrogante, señaló que el problema de fondo es que “faltan dólares, comerciales y financieros”, que generaron tensiones de corto plazo. “Nadie pensó que iban a venir tan de golpe”, reconoció, y recordó que el déficit se comenzó a financiar principalmente con deuda.
Al respecto, indicó que “entró en colisión rápidamente” y la respuesta natural fue la reducción del gasto interno vía tipo de cambio alto, que terminó afectando el consumo y produciendo una caída de la inversión por menor actividad. En el mejor de los casos, permitiría mejorar el resultado comercial y financiar el pago de la deuda.
De todos modos, advirtió que hay un problema de estructura productiva, donde sigue pendiente pensar cómo exportamos más y mejor, con una política industrial que permita generar dólares genuinos y volver a crecer.
En este contexto, señaló que la macro impacta en la coyuntura de las empresas, con problemas en el sistema financiero porque el tipo de cambio salta. Naturalmente, recordó que en estos casos “se dispara la tasa de interés para evitar que continúe el stress a nivel cambiario”. Sin embargo, esto hace saltar inconvenientes en la cadena de pagos, restricciones en el capital de trabajo, freno de la inversión, entre otros.
Previsibilidad
Desde esta perspectiva, sostuvo: “El primer mensaje es que necesitamos tener previsibilidad cambiaria”. En este sentido, pidió un tipo de cambio razonable, competitivo, que acompañe los costos y con políticas sectoriales que permitan corregir este tipo de cambio.
“Hay que recuperar la previsibilidad cambiaria y entender que los costos y los precios relativos deben ser estables en tiempo”, planteó. Además, indicó que es clave ver cuál es la estructura de reintegros para exportar de manera estable y recuperar la previsibilidad de crecimiento. “Nadie invierte si no piensa que va a vender más”, agregó.
Entre otros conceptos, también advirtió en tercer lugar que “es muy difícil planificar a largo plazo si no hay crédito y capital de trabajo a tasas competitivas”.
Inserción internacional
Para Coatz, otro de los puntos a tener en cuenta es cómo insertarse en el mundo de manera inteligente, entendiendo que “hay una gran tensión comercial” que tiene a China y Estados Unidos como protagonistas. Puntualizó que hoy el mundo discute barreras no arancelarias, y comparó que mientras en 1995 había 2.951, actualmente hay 49.106.
“No alcanza con la reputación. Integrarse es clave, pero hay que entender que hay que integrarse viendo cómo uno gana mercados y cuida al mercado interno frente a la fenomenal competencia desleal que hay, sobre todo de los países asiáticos”, alertó. Además, acotó que “el mundo es muy desafiante para agregar valor”.
Costos
“En medio de toda la macro, no se puede abandonar la agenda de costos en el mediano plazo”, indicó el economista de la UIA. Al respecto, señaló que la Argentina en transporte, energía, costo laboral, financiamiento, presión tributaria e infraestructura “está mal”. En este sentido, pidió avanzar en una agenda para mejorar productividad, donde también es importante plantear el tema salarial.
Asimismo, destacó: “El futuro es la industria 4.0”. Sobre ello, aseguró que “hay disrupciones tecnológicas de mercado: la forma de producir y consumir en todo el mundo”. “Hoy todos los países están aprovechando estos cambios tecnológicos para relanzar sus políticas industriales”, resaltó.
Política industrial
Por último, el especialista puso en debate un tema trascendental: “Hay que tener política industrial para poder apuntalar todas las cadenas agroindustriales”. En relación a ello, valoró que la Argentina tiene grandes activos, con una base industrial importante. “Hay recursos humanos calificados, hay investigadores y tenemos recursos naturales”, remarcó.
Desde esta perspectiva, propuso: “Si logramos poner en funcionamiento a la industria, los recursos naturales y la capacidad intelectual que tiene el país, debiéramos tener en los próximos años una recuperación industrial para poder salir de estas crisis recurrentes externas y generar dólares genuinos”.