Las altas tasas son inviables para las industrias y profundizan la recesión
Leandro Garciandía, presidente de la Unión Industrial de Entre Ríos, planteó las serias dificultades que representa para los sectores productivos y toda la población la suba de tasas dispuesta por el Banco Central. “Ese nivel de tasas es imposible, no sólo para financiar capital de trabajo, también olvidémonos de las inversiones”, sostuvo. Asimismo, advirtió que esta política afecta aún más al mercado interno, que se sigue achicando.
En medio de la suba del dólar y la necesidad de controlar la inflación, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) volvió a elevar la tasa de interés. A través de las Leliq, que sólo pueden acceder los bancos, la tasa de referencia volvió a trepar al 68%. La medida resulta inviable para las industrias, que deben atravesar meses complicados ante un mercado recesivo que se profundiza con estas medidas.
Leandro Garciandía, presidente de la Unión Industrial de Entre Ríos (UIER), advirtió sobre los efectos nocivos que genera esta política para los sectores productivos. «El crédito en esas condiciones es inviable porque directamente cualquiera que quiera solicitar dinero con esa tasa de interés está poniendo en serio riesgo su negocio, prácticamente es impagable», sostuvo.
En esta misma línea, hizo hincapié en que «ese nivel de tasas es imposible, no sólo para financiar capital de trabajo, también olvidémonos de las inversiones, en un escenario donde el mercado interno está cada vez más recesivo». En este sentido, planteó que resulta más complejo para quienes destinan su producción dentro del país que al exterior, fundamentalmente porque «no están viendo un horizonte de crecimiento porque el mercado interno se está achicando, a excepción de algunos negocios puntuales».
Para Garciandía, la inviabilidad de esta medida afecta definitivamente a «cualquier tipo de operatoria, ya sea para financiar capital de trabajo como para financiar cualquier tipo de expansión de la capacidad de producción, o bien de la inserción de una planta nueva o negocio nuevo». «Son tasas que hace prohibitiva cualquier tipo de decisión en ese sentido», afirmó.
Factores
El presidente de la UIER analizó los distintos factores que influyeron para que se llegara a esta situación y sintetizó: «Hubo una baja interesante de la tasa hace unas semanas atrás, pero ahora hay mucha volatilidad internacional que está complicando. También está afectando mucho el escenario político, dado que hay una gran incertidumbre respecto al resultado de la elección».
Al respecto, planteó que «todo eso suma y hace un cóctel de desconfianza que evidentemente termina impactando en el refugio en el dólar». En este contexto, lamentó que actualmente el único instrumento que tiene el Banco Central para controlar la cotización de la divisa estadounidense es la tasa de Leliq, que termina impactando negativamente en la economía real.
Inversiones
En relación a ello, Garciandía puso el foco en la postergación de decisiones, que terminan profundizando la recesión. «No sólo a nivel industrial uno posterga inversiones, sino que hay un mercado y toda la población que termina postergando el tener que realizar sus necesidades en pos de tener una tranquilidad financiera», consideró.
Al respecto, explicó: «Así como la industria posterga inversiones, todo el mundo posterga inversiones en su nivel, sea desde un obrero que no cambia un electrodoméstico en la casa, hasta un industrial que hace una ampliación de una planta. En un escenario de incertidumbre, todo el mundo tiende a cubrirse, lo que termina impactando en una recesión. Tienen miedo a quedarse sin liquidez, a perder el trabajo, a perder su empresa, y lo hace asumir posiciones muy conservadoras respecto a lo que tenían proyectado hacer de sus vidas».